Nostalgia...

...¿Por qué no la encerramos en un cajón de la cómoda y perdemos la llave?
Todo esto viene a la iniciativa que han tenido algunos blogs de rememorar aquellos cómics con los que perdieron la virginidad del papel y las viñetas. Qué bonito. Si no fuera por el peligro que encierra. Porque claro, luego nos leemos aquel cómic del que tan grato recuerdo atesorábamos y nos llevemos un chasco que-pa-qué. Y a la mierda tó. Y lo mismo con todo, faltaría plus. Como con El Gran Héroe Americano. ¿Alguien se vio el primer episodio? ¿Os recordó el comienzo a un desquiciante guión de Grant Morrison?
Pero bueno, a lo que íbamos. Unas cuantas muestras de los cómics con los que empecé. Y que, salvo excepciones, no pienso volver a leer:

-La caja de Pandora (Superlópez; el mejor Jan)
-Kitty Pride/Lobezno (el snikt más sobrecogedor; lástima que me lo leyera por segunda vez y me pareciera un coñazo insufrible: ¿quién dijo Claremont?)
-El fénix y la espada (Espada Salvaje; Gil Kane + John Big Buscema= uauh!)

-Flash 1 (Zinco; ahí conocí al Amo de los Espejos)
-Patrulla X (números sueltos de Claremont y Silvestri: no me enteraba de una mierda... ¡pero me molaba! Ahora me estoy haciendo el coleccionable sólo por nostalgia. ¿Captáis lo del peligro que suponen estas cosas también para el bolsillo y el espacio?)