PUNISHER: LA CONJURA DE LOS NECIOS.
Garth Ennis pone el punto y aparte a las aventuras del Castigador tras cuatro años al frente de las mismas (una primera maxi-serie de 12 números y 37 de colección regular). A estas alturas todo suena a muy visto ya y la saga que compone el número está algo estirada, no tiene demasiada gracia e insiste en caracterizar a los héroes invitados como gilipollas (una nota común en las intervenciones de estos personajes en la obra de Ennis), aunque sin llegar a los extremos del Doctor Extraño en Thor: Vikingos. John McCrea está horrible (¿como siempre?) y uno piensa que con Steve Dillon a los lápices el cómic hubiera ganado unos cuantos enteros, aunque no creo que demasiados. Veremos si el irlandés supera su quemazón con el personaje en la nueva encarnación de la serie bajo el sello MAX. Crucemos las uzis.
EMMA FROST: ENSEÑANZA SUPERIOR.
Marvel debía confiar tan poco en la comercialidad de esta serie que decidieron colocar las portadas de Greg Horn como reclamo, un movimiento equivalente a meterle portadas de Playboy a los tebeos de Pokemon. ¿El interior? Un melodrama de jovencitos con la calidad media de un telefilm americano, soso, poco creible y con la única virtud de haberse generado a partir de un flash back de dos páginas en los Nuevos X-Men de Morrison, ahí es nada. El apartado gráfico no es precisamente sobresaliente, pero la serie tampoco merece mucho más.
LOBEZNO Y PUNISHER: EL SANTUARIO DEL MAL.
Seguro que todos estais pensando si hay algo peor que un cómic de Punisher escrito por Garth Ennis en cinco minutos. Y sí, lo hay, y es un cómic de Punisher escrito por Garth Ennis en cinco minutos y coprotagonizado por Lobezno. En comparación este Santuario del Mal perpetrado por Peter Milligan es meramente mediocre y aburrido, desperdiciando alegremente los dibujos de Lee Weeks en un refrito de una idea aparecida en la serie regular del Castigador escrita por Ennis, probablemente lo único que debe haber leído Milligan del personaje. Lo mejor es como consigue hacernos olvidar que él es el guionista, porque realmente no tiene una sola viñeta, idea o diálogo que recuerde su estilo o siquiera que también es capaz de hacer tebeos buenos.
VENENO: ESCALOFRÍO.
¿Un refrito de La Cosa de John Carpenter? ¿Con Veneno? ¿Que se lee en 10 minutos de reloj? ¿De verdad quieres saber algo más sobre esta serie? Bueno, que el siguiente tomo mejora. Es el truco de ponerse el listón bajo. Así es más fácil superarse luego.
THANOS: EPIFANÍA.
Después de tres números decidí dejar de soportar más la tortura que representaba leer Marvel el Fin. En cambio este Thanos resultó un cambio de aire refrescante. Uh, ya me entendéis, es exactamente lo mismo que Starlin lleva haciendo desde antes de que yo naciera, pero por lo menos aquí tiene algo de gracia en la ejecución y reduce el cast a una media docena de personajes sin por ello dejar a un lado sus constantes épico-cataclísmicas-dimensionales habituales.
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